Marzo, 2021
Amados Hermanos y Amigos…
Muchas veces hacemos peticiones a Dios en oración y luego de un tiempo, si no recibimos una pronta respuesta a nuestra petición, optamos por pensar que Dios no responde por algún motivo. Algunos Cristianos opinan que las razones podrían ser:
1 Que no es la voluntad de Dios. 2 Que hemos pedido para malgastar en nuestros propios deseos. 3 Que no somos dignos, o que no somos lo suficientemente buenos. 4 Que Dios no quiere responder porque seguramente estamos fallando en algún lado. 5 En el peor de los casos: porque Dios no le importa.
¿Por qué Dios no está respondiendo? ¿Cuál es la respuesta para esta gran pregunta?
- La Palabra de Dios siempre tiene la respuesta correcta.
1Jn 5:14-15 Y ésta es la confianza que tenemos en Él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, Él nos oye. 15 Y si sabemos que Él nos oye en cualquier cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.
Cuando somos Hijos del Altísimo, sabemos que el siempre nos oye, simplemente porque lo dice su Palabra, en cualquier cosa que pidamos. Ahora ¿cómo saber si lo que pedimos es de acuerdo a su Voluntad?
Mat 7:11 Pues si vosotros, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en el cielo dará buenas cosas a los que le pidan?
Recordemos que hemos sido santificados por la sangre de Cristo, y que estamos revestidos de la justicia de Cristo.
Col 2:13-15 Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con Él; perdonándoos todos los pecados (pasados, presentes y futuros), 14 cancelando el manuscrito de las ordenanzas que había contra nosotros, que nos era contrario, quitándolo de en medio y clavándolo en la cruz; 15 y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en sí mismo.
1Co 6:11 Y esto erais algunos de vosotros; mas ya sois lavados, ya sois santificados, ya sois justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios.
2Co 5:21 Al que no conoció pecado, lo hizo pecado por nosotros, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en Él.
Podría rellenar la página con pasajes que aseguran lo anterior, pero basten esos para recordarnos que podemos llegarnos confiadamente a la presencia de Dios, como Hijos y pedir lo que queramos, ya que si vivimos en comunión con nuestro Padre Celestial, pues Fil 2:13 porque es Dios el que en vosotros obra así el querer como el hacer, por su buena voluntad.
Volviendo a nuestra pregunta: ¿Porqué Dios no está respondiendo?
- La Palabra nos dice cuales son los pasos que debemos seguir para siempre obtener respuesta a nuestras oraciones.
Heb 10:19-23 Entonces, hermanos, puesto que tenemos confianza para entrar al Lugar Santísimo por la sangre de Jesús, 2o por un camino nuevo y vivo que El inauguró para nosotros por medio del velo, es decir, su carne, 21 y puesto que tenemos un gran sacerdote sobre la casa de Dios, 22 acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, teniendo nuestro corazón purificado de mala conciencia y nuestro cuerpo lavado con agua pura. 23 Mantengamos firme la confesión de nuestra esperanza sin vacilar, porque fiel es el que prometió;
- O sea… venir con confianza delante de la misma presencia Santísima de Dios, ya que estamos revestidos de la misma Justicia de Dios, y…
Heb 11:6 Y sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que El existe, y que es remunerador de los que le buscan.
Es importante entender que Dios nos bendice no porque nosotros seamos buenos u obedientes, nos bendice porque Él es bueno y porque estamos revestidos su Justicia en Cristo Jesús. Es Él en nosotros quien nos hace ser justos.
1Jn 4:10 En esto consiste el amor; no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino que Él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados. Rom 3:23 Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios; 24 siendo justificados gratuitamente por su gracia mediante la redención que es en Cristo Jesús; 25 a quien Dios ha puesto en propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia por la remisión de los pecados pasados, en la paciencia de Dios.
Venir sin fe delante de Dios, lo podemos comparar con un hijo que se acerca a un papá amoroso para pedirle algo, pero cree que su papá no lo ama, o no lo ama lo suficiente como para darle lo que pide. Por eso también nos dice la Escritura…
Sant 1:6-7 Pero que pida con fe, sin dudar; porque el que duda es semejante a la ola del mar, impulsada por el viento y echada de una parte a otra. 7 No piense, pues, ese hombre, que recibirá cosa alguna del Señor,
Eso es bastante claro ¿no? Ahora… “mantengamos firme la confesión de nuestra esperanza sin vacilar” quiere decir afirmar y profesar que creemos que lo que hemos pedido ya es nuestro, simplemente porque quien nos ha dado su palabra de que responderá es nada menos que Dios quien no miente.
- Hay muchas escrituras con las cuales podemos fortalecer nuestra fe, ya que la fe viene por escuchar la Palabra de Dios, Rom 10:17
Mar 11:22-23 Jesús les dijo: Tened fe en Dios. 23 Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, mas creyere que será hecho lo que dice, lo que dijere le será hecho.
Okey, digamos que estamos llenos de fe, y que lo estamos haciendo todo bien.
Fil 4:6 Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y súplica, con acción de gracias. 7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestras mentes en Cristo Jesús.
O sea que una vez que hemos pedido, ahora damos acciones de gracia. Y mantenemos nuestra mente ocupada con…
Fil 4:8 Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre, si hay virtud alguna, si alguna alabanza, en esto pensad.
- Siempre debemos orar en el Nombre de Jesús.
Jn 14:13-14 Y todo lo que pidáis en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. 14 si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.
Jn 16:23-24 aquel día no me preguntaréis nada. De cierto, de cierto os digo, que todo cuanto pidiereis al Padre en mi nombre, os dará. 24 Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid y recibiréis, para que vuestro gozo sea completo.
Cuando los discípulos oraban por los enfermos, o echaban fuera demonios, simplemente ordenaban al enfermo a sanar, o al demonio a salir en el nombre de Jesús. Ese es nuestro ejemplo a seguir.
Hech 3:6 Y Pedro dijo: No tengo plata ni oro; mas lo que tengo te doy: En el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda.
Hech 16:18 Y esto lo hacía por muchos días; mas desagradando esto a Pablo, se volvió y dijo al espíritu: ¡Te ordeno, en el nombre de Jesucristo, que salgas de ella! Y salió en aquel mismo momento.
Entonces, Jesús nos dio su nombre y la autoridad que viene su nombre para asegurar la respuesta, y que de esa manera glorifiquemos a nuestro Padre Celestial. Orar en el Nombre de Jesús es vital.
Fil 2:9 Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre; 10 para que al nombre de Jesús, se doble toda rodilla; de los que están en el cielo, y en la tierra, y debajo de la tierra, 11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para la gloria de Dios Padre.
- Ahora voy a introducir un ingrediente más, el cual también es indispensable cuando hemos pedido algo en oración.
Heb 6:11-18 11 Pero deseamos que cada uno de vosotros muestre la misma solicitud hasta el fin, para alcanzar la plena seguridad de la esperanza, 12 a fin de que no seáis perezosos, sino imitadores de los que mediante la fe y la paciencia heredan las promesas. 13 Porque cuando Dios hizo la promesa a Abraham, no pudiendo jurar por otro mayor, juró por sí mismo, 14 diciendo: Ciertamente bendiciendo te bendeciré, y multiplicando te multiplicaré. 15 Y así, esperando con paciencia, alcanzó la promesa. 16 Porque los hombres ciertamente juran por el que es mayor; y el juramento para confirmación es para ellos el fin de toda controversia. 17 Por lo cual, queriendo Dios mostrar más abundantemente a los herederos de la promesa la inmutabilidad de su consejo, lo confirmó con juramento; 18 para que por dos cosas inmutables, en las cuales, es imposible que Dios mienta, tengamos un fortísimo consuelo, los que nos hemos refugiado asiéndonos de la esperanza puesta delante de nosotros.
O sea que mediante la fe y la paciencia heredamos las promesas. En ese pasaje de Hebreos vemos que Dios juró, aunque con solo Él decirlo es suficiente, pero lo hizo para mostrar a los herederos de la promesa, que somos nosotros los Cristianos, tengamos fortísimo consuelo, y nos agarremos de la esperanza puesta delante de nosotros.
O sea que pedimos lo que queremos. Si se trata de curación, sabemos que Jesús pagó por la curación de nuestros cuerpos con sus azotes.
Isa 53:4-5 Ciertamente llevó Él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. 5 Mas Él herido fue por nuestras transgresiones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre Él, y por su llaga fuimos nosotros curados.
1Pe 2:24 Quien llevó Él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, siendo muertos a los pecados, vivamos a la justicia; por las heridas del cual habéis sido sanados.
Jesús pagó para que nosotros los Hijos del Altísimo tengamos buena salud. ¿Acaso Dios todopoderoso, enviaría a Jesús a derramar su sangre por nosotros solo para perdonar nuestros pecados y sanar nuestras almas, y nos dejaría enfermos físicamente? Jesús hizo un trabajo completo.
Entonces ¿Por qué enfermamos? Pues vivimos en un mundo caído y lleno de espíritus del mal que nos atacan. Efe 6:12 porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este mundo, contra malicias espirituales en las alturas.
Sin embargo si tenemos claro que tenemos autoridad sobre todos esos malos espíritus, entonces podemos mandarlos a salir y tienen que hacerlo.
Luk 10:19 He aquí os doy potestad de hollar sobre las serpientes y sobre los escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y nada en ningún modo os dañará.
Mar 16:17-18 Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; 18 tomarán serpientes; y si bebieren cosa mortífera, no les dañará; sobre los enfermos pondrán sus manos y sanarán.
Una vez que hemos orado, ahora esperamos con confianza y paciencia y ponemos nuestra mente en las promesas de Dios, y profesamos con nuestra boca palabras de afirmación, declarando que tenemos lo que hemos pedido por fe.
2Co 5:7 (porque por fe andamos, no por vista):
Heb 11:1 Ahora bien, la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.
Heb 10:23 Mantengamos firme la profesión de nuestra esperanza sin vacilar, porque fiel es el que prometió;
2Co 4:13 Pero teniendo el mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí, por lo cual también hablé; nosotros también creemos, por lo cual también hablamos;
Hablando sobre Abraham el apóstol Pablo explica que él…
Rom 4:17 (como está escrito: Padre de muchas naciones, te he hecho) delante de Dios, a quien creyó; el cual da vida a los muertos, y llama las cosas que no son, como si fuesen.
Allí vemos que Dios llamó a Abraham padre de naciones, muchos años antes de que él tuviera hijos, y Dios esperó hasta que tanto él como Sara no pudiesen tener hijos, pero…
Rom 4:19 Y no se debilitó en la fe, ni consideró su cuerpo ya muerto (siendo ya como de cien años), ni la matriz muerta de Sara. 20 Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se fortaleció en fe, dando gloria a Dios, 21 plenamente convencido que todo lo que Él había prometido, era también poderoso para hacerlo; 22 por lo cual también le fue contado por justicia. 23 Y eso de que le fue contado, no fue escrito solamente por causa de él, 24 sino también por nosotros, a quienes será contado, esto es, a los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús nuestro Señor; 25 el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación.
O sea que Abraham en lugar de mirar sus condiciones puso su mira en las promesas de Dios. Nosotros debemos hacer igual, no mirar a los gigantes en nuestra tierra prometida, sino… 1Jn 4:4 Hijos míos, vosotros sois de Dios y los habéis vencido, porque mayor es el que está en vosotros que el que está en el mundo.
Yo he recibido curación de esta manera muchas veces. Pido fortaleza, reprendo al enemigo, lo mando a irse y luego confieso que estoy curado por las llagas de Cristo quien pagó por mí, y me declaro curado constantemente, y mi curación siempre viene.
Si es liberación por alguna debilidad, o algún mal hábito, o algún vicio, pues igual…
Heb 12:1 Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso, y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante…
Y ¿Cómo nos despojamos del pecado que nos asedia? 2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual, por el gozo puesto delante de Él sufrió la cruz, menospreciando la vergüenza, y se sentó a la diestra del trono de Dios.
No nos despojamos del pecado tratando de hacerlo con nuestros esfuerzos carnales, sino teniendo los ojos siempre fijos en Jesús, quien no solo es el autor de nuestra fe, sino también el consumador de ella. En otras palabras… Fil 1:6 estando confiado de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo.
Nos declaramos libres de cualquier fuerza del enemigo que nos quiera aprisionar, porque…
Jn 8:34 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo: Todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. 35 Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el Hijo sí permanece para siempre. 36 Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.
Porque Jesús nos liberto somos verdaderamente libres.
Si tenemos falta de finanzas, pues… Mat 6:33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. 34 Así que, no os afanéis por el mañana, que el mañana traerá su afán. Bástele al día su propio mal.
Php 4:19 Y mi Dios proveerá a todas vuestras necesidades, conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.
Pedimos y recibimos, porque todo el que pide recibe. Mat 7:8
Ahora en el área de las finanzas es bueno recordar, que cuando damos recibimos… 2Co 9:6 Pero esto digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra abundantemente, abundantemente también segará. 7 Cada uno dé como propuso en su corazón; no con tristeza, o por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. 8 Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia; a fin de que, teniendo siempre toda suficiencia en todas las cosas, abundéis para toda buena obra; 9 como está escrito: Esparció, dio a los pobres: Su justicia permanece para siempre. 10 Y el que da semilla al que siembra, también dará pan para comer, y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los frutos de vuestra justicia; 11 para que enriquecidos en todo abundéis en toda liberalidad, la cual produce por medio de nosotros agradecimiento a Dios.
Siembra tu semilla, o sea tus ofrendas de dinero o de bienes en la obra de Dios, ayudando a los misioneros, a las Iglesias que predican la Palabra y ganan almas para el Reino, a los necesitados que te rodean. Pídele a Dios que te guie para que tus donaciones vayan al mejor lugar, y cuando lo das… Mat 6:1 Cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos. 2 Por eso, cuando des limosna, no toques trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres. En verdad os digo que ya han recibido su recompensa. 3 Pero tú, cuando des limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha, 4 para que tu dadiva sea en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.
Finalmente la respuesta a la pregunta inicial… Si esperamos con paciencia, fe y profesando con nuestras palabras sin titubear que hemos recibido lo que pedimos la respuesta es firme y segura, siempre llega en el mejor momento: en el tiempo de Dios.
Jn 15:7-8 Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que queráis y os será hecho. 8 En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos.
Dios se glorifica en responder nuestras oraciones. Si no respondiera pasaría por mentiroso.
Recordemos también que muchas veces pedimos algo, pero Dios nos da algo diferente pero mejor de lo que le pedimos. Igual que un hijo con su padre. Tal vez el hijo pide una moto, pero su papá le regala un carro. Rom 8:28 Y sabemos que todas las cosas ayudan a bien, a los que aman a Dios, a los que conforme a su propósito son llamados.
Heb 4:14 Por tanto, teniendo un gran Sumo Sacerdote, que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra confesión. 15 Porque no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas; sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. 16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.
Bendiciones… Alejandro
Si estas líneas te han sido de bendición, no dudes en compartirlas con tus contactos. Hoy es el día, mañana puede que sea tarde. Debemos hacer las obras del que nos escogió mientras es de día, la noche vendrá en que nadie podrá trabajar. Jn 9:4
Además, como habrás notado, todo nuestro material está ahí para ti totalmente gratis. Si el Señor te inspira a dar una donación para ayudarnos a continuar compartiendo la Palabra con el mundo, hay un enlace a nuestra cuenta Pay Pal en nuestra página de inicio. Estaremos eternamente agradecidos... ¡Bendiciones en el Nombre de Jesús…!!!
Comments