Hay algunas denominaciones Cristianas que afirman que los días de los milagros ya pasaron, y que estaban destinados a ser solo para los días de Jesús y de los apóstoles. Pero si Jesús resucitó de los muertos, así como sabemos los Cristianos y Él está con nosotros… ¿Será que Jesús sigue siendo el mismo de ayer, y que será por siempre?
Esto es lo que afirma el Nuevo Testamento encontramos…
Jn 6:14 Entonces aquellos hombres, viendo el milagro que Jesús había hecho dijeron: Verdaderamente éste es el Profeta que había de venir al mundo.Jn 2:23 Y estando en Jerusalén, en la Pascua, en el día de la fiesta, muchos creyeron en su nombre cuando viendo los milagros que hacía.
Jn 3:2 Él vino a Jesús de noche y le dijo: Rabí, sabemos que tú eres un maestro que viene de Dios; porque nadie puede hacer estos milagros que tú haces, a menos que Dios esté con él. Jn 6:2 Y le seguía gran multitud, porque veían sus milagros que hacía en los enfermos.
Jn 7:31 Y muchos del pueblo creyeron en Él, y decían: El Cristo, cuando venga, ¿hará más milagros que los que Éste ha hecho?Jn 9:16 Entonces unos de los fariseos decían: Este hombre no es de Dios, pues no guarda el sábado. Otros decían: ¿Cómo puede un hombre pecador hacer tales milagros? Y había disensión entre ellos.Jn 11:47 Entonces los príncipes de los sacerdotes y los fariseos reunieron el concilio, y dijeron: ¿Qué haremos? Porque este hombre hace muchos milagros.
Así que esos pasajes implican que muchas personas creyeron porque vieron los milagros de Jesús, y “nadie puede hacer estos milagros a menos que Dios esté con él” Ahora desde la perspectiva de Jesús
Juan el Bautista envió dos de sus discípulos a Jesús… Luc 7:18-22 Los discípulos de Juan le dieron las nuevas de todas estas cosas. Y llamó Juan a dos de sus discípulos, y los envió a Jesús, para preguntarle: ¿Eres tú el que había de venir, o esperaremos a otro? Cuando, pues, los hombres vinieron a él, dijeron: Juan el Bautista nos ha enviado a ti, para preguntarte: ¿Eres tú el que había de venir, o esperaremos a otro? En esa misma hora sanó a muchos de enfermedades y plagas, y de espíritus malos, y a muchos ciegos les dio la vista. Y respondiendo Jesús, les dijo: Id, haced saber a Juan lo que habéis visto y oído: los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos oyen, los muertos son resucitados, y a los pobres es anunciado el evangelio;
Así que vemos que Jesús utilizó sus milagros para que Juan Bautista estuviera seguro que Él es el Mesías anunciado por los profetas del Antiguo Testamento. Luego dijo a los judíos...
Jn 10:25 Jesús les respondió: Os lo he dicho, y no creéis; las obras que yo hago en nombre de mi Padre, ellas dan testimonio de mí;
A sus discípulos…
Jn 14:11-14 Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí; de otra manera, creedme por las mismas obras. De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre. Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.
Esa es una afirmación muy clara de que los futuros creyentes en Él harán milagros también, o ¿no?
Mat 21:21-22 Respondiendo Jesús, les dijo: De cierto os digo, que si tuviereis fe, y no dudareis, no solo haréis esto de la higuera, sino que si a este monte dijereis: Quítate y échate en el mar, será hecho. 22 Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis.
¿Ves que Jesús está haciendo claro que los que creerán en Él también harán obras como las suyas? Ve en la oración de Jesús no sólo por los discípulos de su tiempo, sino también por aquellos que en un día futuro le seguirán Jn 17:20-23 Mas no ruego solamente por estos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste. La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno. Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado.
Tengan en cuenta que en esa oración, Jesús dice claramente que es debido a la unión que tenemos con el Padre y con Él, que es esa unidad lo que hará que el mundo crea que Él es el Hijo de Dios, el Salvador. Jesús también dijo a sus discípulos que las señales milagrosas seguirán también a los creyentes futuros.
Mar 16:17-20 Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán. Y el Señor, después que les habló, fue recibido arriba en el cielo, y se sentó a la diestra de Dios. 20 Y ellos, saliendo, predicaron en todas partes, ayudándoles el Señor y confirmando la palabra con las señales que la seguían. Amén.
¿Lo ven? al final en ese pasaje, los milagros son los que confirmaban la Palabra que los discípulos predicaban, al igual que lo hicieron para Jesús. Entonces en el libro de Hechos el mismo argumento, y la declaración se plantea varias veces.
Hech 2:22 Varones israelitas, oíd estas palabras: Jesús Nazareno, varón aprobado de Dios entre vosotros con milagros y prodigios, y señales que Dios hizo en medio de vosotros por medio de Él, como también vosotros sabéis.
Entonces los primeros apóstoles comenzaron a realizar maravillas y milagros … Hech 2:43 Y vino temor sobre toda persona: y muchos prodigios y milagros eran hechos por los apóstoles.
Al leer la oración de Pedro vemos que el pide… Hech 4:29-30 Y ahora, Señor, mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra; y extiende tu mano para que sanidades, y milagros y prodigios sean hechos por el nombre de tu santo Hijo Jesús.
Y vemos que Dios responde esa oración de esta manera…
Hech 5:12 Y por mano de los apóstoles eran hechos muchos milagros y prodigios en el pueblo; y estaban todos unánimes en el pórtico de Salomón.
Hasta los enemigos de la Iglesia señalaban los milagros como algo que aunque querían, no podían negar…
Hech 4:16 diciendo: ¿Qué haremos con estos hombres? Porque de cierto, un milagro notable ha sido hecho por ellos, manifiesto a todos los que moran en Jerusalén, y no lo podemos negar.
Pero luego, además de los apóstoles, vemos que los discípulos comienzan a hacer milagros también.
Hech 6:8 Y Esteban, lleno de fe y de poder, hacía grandes prodigios y milagros entre el pueblo.
Hech 8:6 Y el pueblo, unánime, escuchaba atentamente las cosas que decía Felipe, oyendo y viendo los milagros que hacía.
Hech 8:13 Entonces Simón mismo también creyó, y cuando fue bautizado, permaneció con Felipe, y viendo las maravillas y grandes milagros que se hacían, estaba atónito.
Luego encontramos a Pablo, quien era enemigo de la Iglesia, él no había conocido a Jesús, pero una vez que se vuelve a Cristo, también comienza a hacer milagros.
Hech 14:3 Con todo eso, ellos se detuvieron allí mucho tiempo, hablando con denuedo en el Señor, el cual daba testimonio a la palabra de su gracia, concediendo que señales y milagros fuesen hechos por las manos de ellos. 15:12 Entonces toda la multitud calló, y oyeron a Bernabé y a Pablo, que contaban cuántos milagros y maravillas había hecho Dios por medio de ellos entre los gentiles. 19:11-12 Y hacía Dios milagros incomparables por mano de Pablo; de tal manera que aun los pañuelos o delantales de su cuerpo eran llevados a los enfermos, y las enfermedades se iban de ellos, y los malos espíritus salían de ellos.
Los milagros no terminan ahí, al continuar la lectura del libro de Hechos, vemos cómo Dios continuó haciendo milagros a través de su Iglesia hasta el último capítulo.
Luego en las Epístolas encontramos…
Pablo da testimonio de... Rom 15:19 con potencia de milagros y prodigios, por el poder del Espíritu de Dios; de manera que desde Jerusalén, y los alrededores hasta Ilírico, todo lo he llenado del evangelio de Cristo.
2Co 12:12 Ciertamente las señales de apóstol han sido hechas entre vosotros en toda paciencia, en señales, y en maravillas y prodigios.
Heb 2:4 testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros, y dones del Espíritu Santo según su voluntad.
Al respecto de su predicación...
1Co 2:2-5 Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a este crucificado. Y estuve entre vosotros con debilidad, y mucho temor y temblor; y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder, para que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.
Al referirse a ciertos hermanos, que andaban en Corinto, envanecidos porque aparentemente andaban predicando inflados en su propia sabiduría escribió...
1Co 4:18-20 Mas algunos están envanecidos, como si yo nunca hubiese de ir a vosotros. 19 Pero iré pronto a vosotros, si el Señor quiere, y conoceré, no las palabras, sino el poder de los que andan envanecidos. Porque el reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder.
1Tes 1:5 porque nuestro evangelio llegó a vosotros no sólo en palabra, sino también en poder, y en el Espíritu Santo, y en plena certidumbre; como bien sabéis qué clase de hombres fuimos entre vosotros por amor a vosotros.
Veamos… 2Co 5:18-21 Y todo esto procede de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por medio de Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación; a saber, que Dios estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo mismo, no tomando en cuenta a los hombres sus transgresiones, y nos ha encomendado a nosotros la palabra de la reconciliación. Por tanto, somos embajadores de Cristo, como si Dios rogara por medio de nosotros; en nombre de Cristo os rogamos: ¡Reconciliaos con Dios! Al que no conoció pecado, le hizo pecado por nosotros, para que fuéramos hechos justicia de Dios en Él.
En otras palabras, el ministerio de la reconciliación que tenía Jesús de reconciliar al mundo con Dios, nos fue dado a nosotros, “la Iglesia”. ¿Podríamos continuar su ministerio sin el poder del Espíritu de Dios que estaba en Jesús? Si Jesús en nosotros no es el mismo que cuando Él estaba aquí, entonces el Cristianismo se convierte en otra religión más, esfuerzos humanos de ir a Dios y agradarle guardando mandamientos.
Poderosas afirmaciones de Jesús… Hech 1:8 pero recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo; y me seréis testigos, a la vez, en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.” ¿Qué creen que significa tener el poder del Espíritu Santo?
Mat 28:20 he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.
El profeta Daniel escribió que el pueblo de Dios será fuerte en los “últimos días” y hará grandes obras...
Dan 11:32-33 mas el pueblo que conoce a su Dios, se esforzará y hará proezas. Y los sabios del pueblo instruirán a muchos.
Dan 12:3 Y los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que guiaron a muchos a la justicia, como las estrellas, a perpetua eternidad.
Apo 22:12 Y he aquí, yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según fuere su obra.
Oro para que esos pasajes de la Palabra de Dios te inspiren a no conformarte con ser un Cristiano mediocre, sino dar tu todo para llegar a ser lo que Dios espera de ti.
Bendiciones... Alejandro
Efe 2:10 Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para hacer buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviéramos en ellas.
Si estas líneas te han sido de bendición, no dudes en compartirlas con tus contactos. Hoy es el día, mañana puede que sea tarde. Debemos hacer las obras del que nos escogió mientras es de día, la noche vendrá en que nadie podrá trabajar. Jn 9:4
Además, como habrás notado, todo nuestro material está ahí para ti totalmente gratis. Si el Señor te inspira a dar una donación para ayudarnos a continuar compartiendo la Palabra con el mundo, hay un enlace a nuestra cuenta Pay-Pal en nuestra página de inicio. Estaremos eternamente agradecidos... ¡Bendiciones en el Nombre de Jesús…!!!
Comments